Niños: la clave de vender productos o servicios a sus padres

Imagina que existe un ser que influye en las compras que hace un adulto… Pues este ser es real y los llamamos ‘’niños’’.

Los niños son seres moldeables a quienes las compañías bombardean de mensajes con el fin de atraerlos a consumir algo como: productos de supermercado, juguetes, alimentos, películas, entre otros. Los niños de generación Z o alfa, han crecido en la era tecnológica invadidos de dispositivos electrónicos que hoy en día, ya no solo es común, sino que para ellos es más fácil usar.

Actualmente no es de extrañar que un niño o niña con tan solo 1 año, sepa qué hacer para poner su video favorito en Youtube o reconocer su serie favorita en Netflix. Es por este motivo que los infantes son el público objetivo, en su mayoría, de muchas empresas.

De acuerdo con un estudio en Canadá de YTV's Tween Report, los niños tienen una influencia muy importante en la decisión de las compras familiares. Pues los pequeños de 9 a 14 años gastan 1.900 millones de dólares al año e influyen en compras por valor de 20.000 millones de dólares a sus familias.

Así mismo, si un infante mira algún anuncio de televisión donde despierta su interés por el juguete de Batman, existe un porcentaje elevado de probabilidad que lo adquiera.

Por otra parte, hasta los 4 o 5 años, la mayoría de niños ven mucha publicidad con la misma atención. Por ello, los anuncios que van dirigidos a ellos tienden a ser mucho más dinámicos, rápidos, divertidos y felices. De los 8 a 12 años, comienzan a tener más noción de que lo que están viendo en televisión se les vende, sin embargo, aún son vulnerables a ellos.

Como resultado de las sensaciones que les provocan, ahora existe todo un segmento en la industria del marketing dedicada a hallar la manera de vender productos o servicios a los niños para que los padres los adquieran.

Ahora responde, ¿En una juguetería quién es el objetivo, el niño o el padre? En otras palabras, ¿debemos atraer al que quiere el producto o al que puede pagar por él?

Para vender un producto se ofrece una variedad de opciones a los clientes con estrategias de marketing, publicidad invasiva y esto hace que para ellos sea difícil elegir, sin embargo, para los padres es aún más completo. Pues ellos tienen una presión adicional. 

Si nos damos cuenta, la mayoría de veces que vamos a adquirir una compra, tendemos a preguntar qué opción es más conveniente para nosotros, (en este caso los padres a sus hijos), es aquí cuando entran en escena.

Aquí te  mostramos 3 momentos en los que los niños son quienes deciden la compra:

Asociaciones

Los productos que tienen personajes de caricaturas de alguna película o serie de televisión del momento, tienden a tener un incremento de ventas mayor, pues los niños se dejan guiar más por el personaje que por el producto en sí.

Productos influenciables

Existen casos donde usar personajes puede ser ilegal. Por eso se crean productos que son tan fáciles de usar, así como atractivos que el niño desea tenerlo o despierta el anhelo en sus amigos.

Necesidad

Si nos damos cuenta, existen empresas como Mcdonalds que tienden a usar mucho la estrategia de implementar juguetes la hora de comprar una cajita feliz. Un niño que mire a uno de sus personajes dentro de esta y se de cuenta que le faltan otros 5 juguetes de esta serie, insistirá a sus padres para regresar a comprar más cajitas felices y así, adquirir la colección completa.

Lograr captar la atención de los niños no es difícil, lo único que necesitas es una estrategia donde implementes un producto o servicio divertido, alegre, creativo y sobre todo atractivo.